04 Sep Carmen Herrera, 102 años pintando sueños
Ahora que la gran mayoría volvemos de vacaciones y andamos con la lista de propósitos para la nueva temporada, es buen momento, para insuflar aliento de esperanza a todos aquellos que dejan de hacer por creer, que ya no llegan a tiempo o es demasiado tarde. –“Cuando era más joven, nadie sabía que yo era pintora. Ahora están empezando a saber que lo soy. He esperado tanto tiempo. Existe un dicho: si perseveras, triunfarás. Y yo digo que sí. Perseveré durante casi un siglo (se ríe). ¡Y triunfé! (a carcajadas)”- Ella es Carmen Herrera, tiene 102 años y es una pintora muy cotizada desde que vendió su primer cuadro a los 89 años.
Su historia da para escribir un buen libro, cubana de nacimiento, hija de editor de periódico y una reportera, conoció desde pequeña la maleta por casa. Se casó con un intelectual y se trasladó a la que ahora es su residencia: Nueva York, pasando antes por París. Desde siempre, la pintura fue su arte y oficio, pero su técnica: la abstracción geométrica no casaba con la moda –“Cuando me mudé a Nueva York, el tipo de arte que yo hacía no era aceptable(…) Ninguna galería estaba interesada en exponer mis obras”- Pero ella, alentada por su propio marido y su honestidad artística siguió con su estilo a pesar de ser rechazada. Hoy sus pinturas forman parte de las colecciones permanentes del MOMA de Nueva York o la TATE Modern, entre otras. La prestigiosa casa de subastas Christie’s vendió el cuadro –Verticals- de Herrera por 751.500 dólares, superando todas las expectativas. Desde entonces sus pinturas son cotizadas y muchos la han bautizado como –la guerrera silenciosa de su arte- porque ha alcanzado un reconocimiento ha su estilo, sin perder su esencia. Creyó en ella más allá del rechazo y dejó de buscar el éxito, pero sin abandonar su pasión.